Señales de alerta para la familia y para la persona.
Existen algunos cambios en la persona que pueden constituir señales de alerta:
Anorexia Nerviosa
- Pérdida de peso progresiva o brusca relacionada con una forma diferente de comer, forma que la persona define como “más sana”.
- Se obsesiona por pesarse constantemente, aunque un grupo puntual adquieren una cierta fobia a pesarse.
- Evita comidas donde pueda ser controlada con justificaciones varias y coartadas más o menos creíbles.
- Puede mostrarse inicialmente más eufórica, más contenta. La persona puede mostrar incluso una mayor preocupación por su aspecto, por comprarse ropa, fundamentalmente al principio del cuadro.
- El objetivo de peso que se plantea, si lo dice, está fuera de los límites de la normalidad A pesar de ello, normalmente nunca se sienten satisfechas con el peso conseguido.
- Renuncian a cualquier cita social que implique comer aunque estén en un peso muy bajo.
- Obliga a los demás a comer como ella o más. Está muy pendiente de lo que comen los demás e incluso quiere llevar el gobierno de las tareas culinarias de la casa y la compra de la comida para toda la familia.
- Respuesta muy agresiva ante cualquier comentario que hagan los demás sobre su manera de comer.
- Su forma de comer es muy peculiar; corta en exceso, manipula, separa, quita la grasa con papel de cocina o esconde comida.
- Aumenta el consumo de tabaco, bebidas light, caramelos sin azúcar y otros productos para controlar el hambre.
- Se empieza a interesar en exceso por los temas de nutrición, recetas y temas de cocina. Le gusta cocinar para toda la familia, aunque luego no lo prueba.
- Tendencia a sustituir a la madre en las tareas generales de la casa, haciendo que la madre pierda su rol en el sistema familiar.
- Muchas veces llegan a adquirir una postura muy dominante en todo el sistema familiar.
- Empiezan a hacer mucho ejercicio físico en solitario. Pueden ser actividades como subir escaleras, saltar, bailar en casa, hacer abdominales y abusar del ejercicio en el gimnasio. Lógicamente, estas prácticas también están envueltas de mentiras y manipulación para que la familia pueda excusarla.
Bulimia Nerviosa
- Frecuentes y largas visitas al baño después de comer con diferentes excusas cuando le preguntan la familia o los amigos.
- Desaparición de comida de la despensa.
- Restos de comida o de envoltorios en la habitación.
- Fluctuaciones de peso muy rápidas.
- Gastos de dinero sin justificación. Pueden incluso llegar a sustraer dinero.
- Sospecha de vómitos. Restos de vómitos en el inodoro, pueden llegar a ocultarlos en bolsas de plástico, servilletas,…
- Aumento en el consumo de agua.
- Descubrimiento de laxantes, diuréticos o pastillas adelgazantes.
- Aumento de la fatiga o aparición de mareos o calambres. Presencia de boqueras continuadas, diarreas y/o ganas de orinar frecuentes.
- "Signo de Russell": Callosidad en el dorso de la mano producida por la erosión dentaria debida a los vómitos continuos.
- Dificultades de concentración y disminución del rendimiento: disminuye el rendimiento académico y en el área laboral se inician o aumentan las bajas laborales..
- Al principio la persona sale mucho y conforme evoluciona el trastorno aumenta el aislamiento, aprovechando los momentos de soledad para fomentar las conductas patológicas.
- Algunas personas presentan otras alteraciones impulsivas como: conductas autolesivas, abuso de sustancias y/o promiscuidad.
- Problemas dentales: deterioro del esmalte de los dientes.
En Anorexia y Bulimia Nerviosa
- Respecto a la imagen corporal, se pueden enumerar las siguientes señales de alerta:
- Frecuentes comentarios acerca de lo negativo en su imagen corporal.
- Admiran mucho la delgadez de los demás, prestando una atención especial a todas los mensajes e imágenes de los medios de comunicación que van en este línea.
- Constantes conductas de comprobación sobre el tamaño y forma de su cuerpo.
- Dedican mucho tiempo a vestirse y arreglarse. Algunas personas compran ropa compulsivamente, otras se descuidan y no se compran nada.
- Las citas sociales giran en torno a cómo se sienten con su cuerpo.
- Gasto excesivo en cosmética y tratamientos corporales.
- Conductas autolesivas hacia su cuerpo con objeto de dañarlo.
- Problemas relacionados con la baja autoestima.
- Dificultades en el reconocimiento y en la expresión adecuada de las emociones.
- Depresión e inestabilidad emocional.
- Problemas de ansiedad, miedos en general y obsesiones.
- Las relaciones familiares se vuelven muy conflictivas, principalmente en torno a los temas relacionados con la comida.
- Las relaciones con el grupo de iguales normalmente se complican porque normalmente las salidas giran alrededor de la comida. Vuelven a utilizarse los engaños, o se rechazan las invitaciones a salir. Tarde o temprano, aumenta el aislamiento.
- En el caso de que tengan pareja se estrecha esta relación y las apartan del grupo social, estableciendo con ellas una relación de dominancia. La pareja pasa a asumir un rol de cuidador pero con ningún papel directivo.
Tomado de : ITA. Instituto de Trastornos Alimentarios • Avinguda Tibidabo, 30 • 08022 Barcelona